Poner en escena poemas de Miguel Hernández resulta siempre un reto. Desde los primeros poemas de su juventud adorando su entorno y su vida, pasando por el dolor de la guerra, su soledad en la cárcel sin “Josefina y Manolito”, hasta su muerte en 1942. Nuestra propuesta es dejar sonar sus versos a través de los y las intérpretes que los declaman tras la sábana de la sensibilidad que arropa cada poema. Actrices, actores y música. Versos cantados del poeta que iérbola actualiza y funde en nuevos acordes. Un espectáculo en continuo movimiento que hace aflorar la sensibilidad del público.